Los amantes de la serie animada favorita de América, Los Simpson, reconocen de inmediato el sonido y apariencia del saxofón de Lisa, que es como un personaje más debido al valor simbólico e importancia en la vida de esta niña prodigio, quien en apariencia aprendió a tocar por sí misma y a muy temprana edad; hoy en día podemos encontrar una enorme variedad de material didáctico disponible en Internet y en medios impresos para aprender de forma autodidacta a tocar un instrumento como el Yamaha, marca que destaca por la calidad de sonido que ha hecho que sean conocidos como la mejor marca en saxofones.
La práctica y el aprendizaje mediante tutoriales o cursos a través de Internet que fomentan el autodidactismo ha permitido que más personas puedan aprender a tocar sus instrumentos favoritos, superando barreras económicas o sociales, por ejemplo la falta de recursos para tomar clases con un maestro de música, la falta de disponibilidad de un profesor especializado en los instrumentos que más nos gustan o por cualquier otra razón.
Incluso muchos músicos famosos han aprendido a tocar por sí mismos desde antes de la era del Internet, en gran parte gracias a un oído muy fino, que les permite reconocer notas y tratar de reproducirlas, o hasta crear nuevas melodías sin tener conocimientos teóricos como la lectura de partituras.
Hoy en día encontramos una oferta extensa de cursos o tutoriales a través de Internet, algunos son gratis mientras que para acceder a otros puede ser necesario el pago, pero con la ventaja de que pueden realizarse videoconferencias para explicaciones más claras y personalizadas, que ayuden a generar las habilidades para tocar un instrumento tan fino como el saxofón, desde cero.
Las claves para aprender a tocar el saxofón son:
Para tocar cualquier instrumento, es necesario conocer las partes que lo componen, que son boquilla, tudel y cuerpo. La boquilla es una de las partes más importantes, pues es por donde se genera el sonido, es una pieza cónica y hueca, a la que se fija una caña de madera con una abrazadera, y por la que se sopla para conseguir el sonido. El tudel es un disco pequeño, un tubo cilíndrico o pieza metálica que termina con un revestimiento de corcho o hilo, que se usa como sello de la boquilla; las lengüetas o tiras de madera de forma rectangular, se fijan al tudel con el hilo o por presión simple. Si la boquilla no se adapta y queda holgado al interior del tudel, la calidad del sonido se verá reducida de inmediato.
El cuerpo del saxofón, usualmente de latón, es el que se ensancha en el extremo para tomar la forma de campana que caracteriza al instrumento; en el tubo tiene entre 20 y 23 agujeros de tono de diferentes tamaños; los agujeros se cubren por almohadillas que los presionan para producir diferentes sonidos, estos se controlan mediante llaves con los dedos, mientras que el pulgar derecho se queda debajo del soporte que ayuda a mantener el equilibrio.
La forma del saxofón le brinda sus cualidades de sonido, tal como otros instrumentos de viento, y encontramos diferentes modelos y formas, como los saxofones soprano, tenor o barítono.
Ser autodidacta es una ventaja, especialmente en el mundo de la música pues podemos encontrar técnicas y métodos para aprender con mayor facilidad y convertirnos en expertos en el instrumento que más nos guste; la mejor manera de aprender a tocar es ir lentamente, con calma y paciencia empezando con las melodías más fáciles de tocar e incrementar la dificultad conforme vayamos desarrollando habilidades; practicar tres veces por semana, por media hora te ayudará a ver avances en el menor tiempo.
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